Por Eva Peña.
Competir en un mundial de porristas no es nada fácil. Ahora imagina hacerlo nueve veces. Eso es justo lo que nuestro personaje entrevistado de esta semana ha hecho.
Aunque comenzó su carrera de porrista como dancer en la secundaria y preparatoria, ante la oferta de una beca por parte de la coach Cristina Pacheco para pertenecer al equipo Leones que tendría una categoría dance, al no concretarse dicho equipo, incursionó en el terreno cheer sin imaginar todo lo que lograría.
Esa decisión la llevó a formar parte de una de las mejores selecciones que ha visto nuestro país, además de ser miembro del staff de uno de los campamentos de verano para porristas más famosos de Estados Unidos. Ella es: Anaid Montes Morelos.
Competir en un mundial de porristas no es nada fácil. Ahora imagina hacerlo nueve veces. Eso es justo lo que nuestro personaje entrevistado de esta semana ha hecho.
Aunque comenzó su carrera de porrista como dancer en la secundaria y preparatoria, ante la oferta de una beca por parte de la coach Cristina Pacheco para pertenecer al equipo Leones que tendría una categoría dance, al no concretarse dicho equipo, incursionó en el terreno cheer sin imaginar todo lo que lograría.
Esa decisión la llevó a formar parte de una de las mejores selecciones que ha visto nuestro país, además de ser miembro del staff de uno de los campamentos de verano para porristas más famosos de Estados Unidos. Ella es: Anaid Montes Morelos.
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¿En qué año fue tu primer mundial y que significó para ti?
Mi primer mundial fue en el 2007, sin duda fue la mejor experiencia de mi vida. Es la meta que tenemos todos los porristas y de hecho cualquier atleta: representar a tu país en el deporte que tanto amas
¿Fue difícil llegar a un equipo mundialista?
Por supuesto, no fue nada fácil. El equipo en el que estaba tenía integrantes muy talentosos, flyers que habían hecho el deporte desde los 6 años, no era nada fácil ganarse un lugar.
¿En cuántos mundiales has participado?
Este mundial fue mi noveno año en ese escenario.
¿Fue difícil quedar seleccionada en MEXICOP?
Si, la verdad antes no se le daba tanta importancia a la gimnasia en las porras en México pero el proyecto de MEXICOP se diseñó para ser un parteaguas en el cheerleading mundial. El objetivo era dejar huella, que la gente nos reconociera y eso sólo se iba a lograr compitiendo en la medida de lo posible en igualdad de circunstancias. Yo nunca fui gimnasta, así que tuve que entrenar muy duro para lograr en menos de un año lo que muchas niñas tienen haciendo toda su vida.
¿Qué satisfacciones y logros te dio pertenecer a MEXICOP?
El reconocimiento de la gente sin duda. Llegar a cualquier lugar diciendo que fuiste selección MEXICOP te abre las puertas. Inmediatamente la gente te respeta como atleta, MEXICOP logró el objetivo. En el ámbito personal considero a todos mis compañeros MEXICOP familia. Son experiencias que se quedan de por vida, y por supuesto poder participar en los campamentos de USSL.
¿Qué representa en tu carrera como porrista haber sido seleccionada para dar campamentos con Rey Lozano?
Literal te puedo decir que el momento más feliz de mi vida fue cuando vi a Rey Lozano acercarse para seleccionarme como parte de su Staff.
Aprender de una de los mejores coreógrafos del mundo. No sólo coreografía sino toda la logística de uno de los campamentos de porras más reconocidos en los Estados Unidos, trabajar enseñando cosas nuevas a los atletas en la cuna del deporte me dejo muchísimo aprendizaje
Mi primer mundial fue en el 2007, sin duda fue la mejor experiencia de mi vida. Es la meta que tenemos todos los porristas y de hecho cualquier atleta: representar a tu país en el deporte que tanto amas
¿Fue difícil llegar a un equipo mundialista?
Por supuesto, no fue nada fácil. El equipo en el que estaba tenía integrantes muy talentosos, flyers que habían hecho el deporte desde los 6 años, no era nada fácil ganarse un lugar.
¿En cuántos mundiales has participado?
Este mundial fue mi noveno año en ese escenario.
¿Fue difícil quedar seleccionada en MEXICOP?
Si, la verdad antes no se le daba tanta importancia a la gimnasia en las porras en México pero el proyecto de MEXICOP se diseñó para ser un parteaguas en el cheerleading mundial. El objetivo era dejar huella, que la gente nos reconociera y eso sólo se iba a lograr compitiendo en la medida de lo posible en igualdad de circunstancias. Yo nunca fui gimnasta, así que tuve que entrenar muy duro para lograr en menos de un año lo que muchas niñas tienen haciendo toda su vida.
¿Qué satisfacciones y logros te dio pertenecer a MEXICOP?
El reconocimiento de la gente sin duda. Llegar a cualquier lugar diciendo que fuiste selección MEXICOP te abre las puertas. Inmediatamente la gente te respeta como atleta, MEXICOP logró el objetivo. En el ámbito personal considero a todos mis compañeros MEXICOP familia. Son experiencias que se quedan de por vida, y por supuesto poder participar en los campamentos de USSL.
¿Qué representa en tu carrera como porrista haber sido seleccionada para dar campamentos con Rey Lozano?
Literal te puedo decir que el momento más feliz de mi vida fue cuando vi a Rey Lozano acercarse para seleccionarme como parte de su Staff.
Aprender de una de los mejores coreógrafos del mundo. No sólo coreografía sino toda la logística de uno de los campamentos de porras más reconocidos en los Estados Unidos, trabajar enseñando cosas nuevas a los atletas en la cuna del deporte me dejo muchísimo aprendizaje
¿Después de competir tantos años en Worlds, ¿qué diferencia hay entre representar a tu equipo base, MEXICOP y un equipo al cual no perteneces como Diablos?
En tu equipo base estás en casa. Te sientes segura, conoces a tus compañeros, la forma de trabajar, a tu entrenador, tienes mucho más tiempo para preparar un elemento y la confianza de tenerlo perfectamente entrenado. Cuando compites con equipos como MEXICOP el primer reto es el tiempo. Normalmente sacábamos una rutina en menos de 24 horas para lograr perfeccionarla los demás días de concentración (que tampoco eran tantos) tienes que aprender a trabajar con gente de diferentes equipos, muchas veces con distintas maneras de hacer las cosas. Pero creo que eso es el encanto de las selecciones. Conoces gente de toda la república y aprendes muchísimo. Además, la pasión que tenían todos te hacía sentir inmediatamente parte de la familia. Todos luchando hacia el mismo objetivo.
En cuanto a Diablos, conocí a los entrenadores en MEXICOP y, como te dije, para mí son familia. Ese año quise darme la oportunidad de ir a Worlds con un equipo que tenía a muchos de mis amigos de MEXICOP. Éramos varios foráneos en el equipo y te puedo decir que inmediatamente nos hicieron sentir bienvenidos. Jamás se notó la diferencia entre los que eran de Aguascalientes, Ciudad de México, Mochis, San Luis Potosí, Texas o Salamanca. También en este caso trabajamos contra reloj pero fueron concentraciones muy bien planeadas y se logró el objetivo.
¿Qué experiencia te ha dejado cada equipo?
Leones es donde crecí, donde aprendí todo lo que significa ser porrista. Leones me abrió las puertas a MEXICOP que me dejó compartir escenario con los mejores atletas del país y ser entrenada por personas altamente reconocidos del medio, así como ejecutar rutinas diseñadas por el mejor coreógrafo del mundo. Y Diablos es la palabra "unión" personificada. Es el mejor ejemplo de trabajo en equipo que conozco.
¿Cómo decidiste ser entrenadora?
Siempre lo supe. Desde que tenía doce años y veía mis pompones en el carro de mis papás sabía que cuando creciera mi carro iba a estar lleno de uniformes de mis niñas.
Sé que cada año asistías a campamentos en Estados Unidos, ¿qué experiencia te ha dejado esto como entrenador, y como porrista?
Aprender de los creadores del deporte. Las porras están en constante evolución y ésta empieza en Estados Unidos. Aprender de ellos y aplicar el conocimiento tanto como entrenadora como atleta.
¿A qué campamentos asistes (con qué asociación y por qué?
Asistí a un campamento de UCA. En ese entonces pertenecíamos a la Universidad Anáhuac y el campamento estaba enfocado al College Cheerleading.
¿Cuáles son tus planes a corto plazo en este medio?
Quiero regresar a competir a nivel nacional, deje de hacerlo hace 2 años y quiero regresar a los escenarios de casa.
En tu equipo base estás en casa. Te sientes segura, conoces a tus compañeros, la forma de trabajar, a tu entrenador, tienes mucho más tiempo para preparar un elemento y la confianza de tenerlo perfectamente entrenado. Cuando compites con equipos como MEXICOP el primer reto es el tiempo. Normalmente sacábamos una rutina en menos de 24 horas para lograr perfeccionarla los demás días de concentración (que tampoco eran tantos) tienes que aprender a trabajar con gente de diferentes equipos, muchas veces con distintas maneras de hacer las cosas. Pero creo que eso es el encanto de las selecciones. Conoces gente de toda la república y aprendes muchísimo. Además, la pasión que tenían todos te hacía sentir inmediatamente parte de la familia. Todos luchando hacia el mismo objetivo.
En cuanto a Diablos, conocí a los entrenadores en MEXICOP y, como te dije, para mí son familia. Ese año quise darme la oportunidad de ir a Worlds con un equipo que tenía a muchos de mis amigos de MEXICOP. Éramos varios foráneos en el equipo y te puedo decir que inmediatamente nos hicieron sentir bienvenidos. Jamás se notó la diferencia entre los que eran de Aguascalientes, Ciudad de México, Mochis, San Luis Potosí, Texas o Salamanca. También en este caso trabajamos contra reloj pero fueron concentraciones muy bien planeadas y se logró el objetivo.
¿Qué experiencia te ha dejado cada equipo?
Leones es donde crecí, donde aprendí todo lo que significa ser porrista. Leones me abrió las puertas a MEXICOP que me dejó compartir escenario con los mejores atletas del país y ser entrenada por personas altamente reconocidos del medio, así como ejecutar rutinas diseñadas por el mejor coreógrafo del mundo. Y Diablos es la palabra "unión" personificada. Es el mejor ejemplo de trabajo en equipo que conozco.
¿Cómo decidiste ser entrenadora?
Siempre lo supe. Desde que tenía doce años y veía mis pompones en el carro de mis papás sabía que cuando creciera mi carro iba a estar lleno de uniformes de mis niñas.
Sé que cada año asistías a campamentos en Estados Unidos, ¿qué experiencia te ha dejado esto como entrenador, y como porrista?
Aprender de los creadores del deporte. Las porras están en constante evolución y ésta empieza en Estados Unidos. Aprender de ellos y aplicar el conocimiento tanto como entrenadora como atleta.
¿A qué campamentos asistes (con qué asociación y por qué?
Asistí a un campamento de UCA. En ese entonces pertenecíamos a la Universidad Anáhuac y el campamento estaba enfocado al College Cheerleading.
¿Cuáles son tus planes a corto plazo en este medio?
Quiero regresar a competir a nivel nacional, deje de hacerlo hace 2 años y quiero regresar a los escenarios de casa.